La presidenta Cristina Fernández de Kirchner recibió el saludo del papa Francisco por escrito -en retribución por la felicitación que en ocasión del Día de Pontífice envió la mandataria el mes pasado-, y resaltó que "cuando querés cambiar las cosas que son injustas o que están mal, el ataque es despiadado; y si lo lográs, es peor todavía"

"Recibí carta de Roma. Bueno, en realidad del Vaticano. ¿Y de quién va a ser? Del Papa. Me contestó el saludo enviado por el día del Pontífice. ¿Vieron? Me dice que no me olvide de pedir por él: `el trabajo no es nada fácil`. El del Papa, claro. Se lo dije el día que estuvimos juntos en Santa Marta. De trabajo difícil sé todo, y más también", escribió la Presidenta en Twitter.

Y continuó: "Cuando querés cambiar las cosas que son injustas o que están mal, el ataque es despiadado. Y si lo lográs, es peor todavía. Y sino mirános a nosotros. Ojalá lo logre. Al menos a él, públicamente nadie lo ofende o lo agravia. Si ya sé, es el Papa. Bueno, alguna ventaja tiene que tener. Por suerte sigue tomando mate".

Cristina explicó que decidió adjuntar la carta porque hay quienes "no se acuerdan que cuando recibí la otra carta de salutación y agradecimiento y no la hice pública, algunos medios (ya se imaginarán cuales) dijeron que había querido ocultar el saludo del Pontífice? ¿Ustedes dicen que son como la Gata Flora? No, no creo. Los gatitos son lindos bichitos".

"Me encantó el deseo de afecto y unión para los argentinos en busca del bien común y la bendición y el pedido de protección para la Presidenta de la Nación Argentina. En nombre de todos…. y todas. Gracias", concluyó la jefa de Estado, sobre la misiva fechada el 25 de junio en la ciudad del Vaticano.

El papa Francisco había agradecido el saludo de la Presidenta con motivo del Día del Pontífice, y deseó que "el Señor le retribuya la delicadeza de haberla escrito Usted misma. Por supuesto que me queda la curiosidad de conocer ese modelo de carta que parecía del siglo XIII, simplemente para fomentar `el sentido del humor`".

"Le agradezco también el cuadro con los sellos postales conmemorativos. Tal y como se lo prometí, la tengo presente en mi oración, a Usted, a sus hijos y a sus muertos. Le pido, por favor, que no se olvide de pedir por mí: el trabajo no es nada fácil", sostuvo, al tiempo que bromeó acerca de que aún sigue "tomando mate, que es siempre más digestivo que el té o el café".

"Le ruego que haga llegar mi afecto y cercanía a todos los argentinos, por quienes rezo cada día para que busquen unidos y concordes el bien común. Que Jesús la bendiga y la Virgen Santa la cuide", concluyó el Papa.