La soprano Florencia Fabris, de 38 años, murió tras sufrir un aneurisma cerebral mientras interpretaba el Requiem de Giuseppe Verdi en el Auditorio Juan Victoria de San Juan. A pesar de la descompostura pudo terminar la presentación, pero sentada. La internaron y falleció en Mendoza.

 

Al persistir el malestar tras el espectáculo, fue atendida por médicos que presenciaban la obra en el auditorio de la facultad de Filosofía, Humanidades y Artes y recomendaron trasladarla al hospital más cercano, donde fue diagnosticada con un ACV. La cantante fue trasladada en ambulancia hacia un hospital de Mendoza, donde fue operada con éxito. Pero luego padeció un segundo derrame que le quitó la vida, informó DyN.

 

Fabris, madre de dos niños de 7 y 9 años, era diplomada en el conservatorio de Santa Cecilia en Roma y con Maestría en el Colón, y en la última década se había convertido en una de las artistas jóvenes más destacadas de la música lírica.