En La Criolla, cuatro trabajadores dedicados a la actividad forestal no sólo no estaban registrados sino que además no percibían sus haberes hacía 71 días al momento del relevamiento.

Denunciaron hacinamiento y pésimas condiciones de higiene: no tenían acceso a un baño, no había energía eléctrica ni agua potable y dormían en colchones en el piso.

Los inspectores del registro detectaron en la Criolla situaciones de hacinamiento y deficientes condiciones de hacinamiento, de cuatro trabajadores.

“La ley de trabajo agrario es muy clara sobre las condiciones laborales, de higiene, transporte y seguridad social que corresponden.

Estas inspecciones son producto de la denuncia de los mismos trabajadores que visualizan al RENATEA como su organismo de referencia y a las políticas públicas como garantía de sus derechos” expresó el Ing. Guillermo Martini, Director General del registro.

Desde la incorporación del RENATEA al Estado, las denuncias de trabajadores aumentaron un 12.000%, pasando de 25 por año a un promedio de 20 denuncias diarias.