Con la presencia de una importante cantidad de público que se acercó al Virgen de Lourdes para acompañar este espectáculo futbolístico organizado por el Decano, y que tuvo como figura principal al “Príncipe”  Francescoli, el “Pipa” Gancedo y el “Negro” Rivarola junto al acompañamiento de muchos futbolistas locales que tuvieron sus momentos inolvidables junto a los ídolos riverplatenses.
Anoche nadie confirmaba la cantidad de pública, pero con algunos datos Tal Cual pudo confirmar que unas 2500 personas, en más o menos, estuvieron presentes y abonaron su entrada anticipada o en puerta desde las 20 horas aproximadamente.
En el primer partido jugaron las divisiones de 1º del local 1º de Mayo versus Independiente de Villa del Rosario y minutos antes de las 22 horas ingresaron los equipos que jugaron el partido principal.
El “Enzo” con la camiseta blanquiverde a bastones, ingresó y por supuesto todos intentaron tener la foto o la firma en la camiseta de River.
El partido fue de ida y vuelta, con atajadas interesantes del “Pío” Guirotane que recibió algunos gritos de la tribuna rogándole “volvé a la primera por favor”, en un duelo imperdible con Jorge Meza que por lo menos en 4 oportunidades lo tuvo en jaque y el portero resolvió muy bien como en sus mejores tiempos.
El equipo de los Amigos del Enzo formó entre otros con Zaupa, Gustavo Pintos, Bochín Peliquero, el Patón Terrusi, el Coco Fangi, Marcelo Benítez,el Tata Gómez entre otros dirigidos por “Yacaré” Pujol y por el otro lado las “estrellas” del Decano que a todos nos dejó en algún momento de nuestras vidas un recuerdo imborrables como los Percara, arquero y marcador de punta, el Pelado Reniero, Popito Terenzano, Maxi Stark, el Negro Testa, Monchi Valdéz, Tabaco Sosa, Charanga Canteros, el Jose Godoy, entre otros pero estaban todos los que alguna tarde de domingo hicieron vibrar el cemento del Virgen de Lourdes.
El resultado, un anécdota, 4 a 1 a favor del Enzo y sus amigos, con cuatro goles del Príncipe, uno principalmente de tiro libre para encuadrarlo y llevarlo a la cabecera de la cama.
“La calidad no se pierde, pero viste como le pega” me decía casi al oído Juancito “Manos Bruja” Acosta deleitándose cuando Francescoli ingresaba al área con la pelota “atada” al botín derecho.
Cinco minutos antes de la finalización del partido el Enzo se despidió de la multitud y todos nos quedamos con una sensación de que habíamos visto jugar, a pesar de sus 52 años y de sus kilos de más, a un verdadero astro del fútbol.

Fuente y foto Tal Cual