Domingo Miño quedó detenido por el delito de “falso testimonio” en el marco de la investigación que trata de dar con el paradero del agenciero Pocho Morales, que desapareció en San Jaime el 30 de agosto de 2011.

Miño es quien aseguró haber visto a “Pocho” Morales en la terminal de ómnibus de Córdoba, por lo que una comisión policial de Chajarí lo trasladó desde esa provincia a San Jaime para que declarase. Pero tras escucharlo, el Fiscal pidió la detención por “falso testimonio”, señalando las incongruencias y afirmaciones que no pudo sostener Miño.
Miño no fue el único testimonio recabado en una jornada que arrancó cerca de las 8 de la mañana de este miércoles y se extendió hasta las 17 horas. Donde estuvieron presentes también los Fiscales y el abogado defensor de la familia Dr. Guillermo Vartorelli.
Tras su alocución, el hombre que hoy vive en Córdoba fue trasladado a la Comisaría Nº 1 de Chajarí, aunque fuentes tribunalicias no descartaban que “recobrara la libertad”.
Las “inconsistencias” en que habría incurrido Miño serían sobre el conocimiento exacto de la fecha de la desaparición de Pocho Morales, él había declarado oportunamente que hacía muy pocos meses que se había enterado, pero hoy una tercera persona que también habría chateado con Miño (además de un concejal de apellido Medina) presentó las copias de las conversaciones lo que habría demostrado que Miño en verdad siempre estuvo al tanto de la noticia de la desaparición.
La pregunta que se hacen los investigadores y el Fiscal es cuál ha sido la razón por la cual Miño expresa tal mentira, sí fue para cobrar la recompensa de 100 mil pesos o para lograr alguna aparición en los medios masivos de comunicación.

Fuente Tal Cual Chajarí