Fue imputado por robo agravado y podría afrontar una condena de cumplimiento efectivo en prisión. Tras el allanamiento a su vivienda, se habían secuestrado elementos que lo involucraban en los saqueos y un video también sirvió de prueba.

El Fiscal Fabio Zabaletta confirmó a Diario Río Uruguay que este jueves se notificó oficialmente al agente municipal Jorge Zabala que quedaba imputado por el delito de “robo calificado”, en el marco de la investigación por los saqueos ocurridos en Concordia entre el 8 y el 9 de diciembre.

En caso de ser encontrado culpable de lo que se investiga podría afrontar una condena de cumplimiento efectivo en prisión.

La situación procesal del trabajador municipal ya había quedado seriamente comprometida luego del video dado a conocer por este medio, tras lo cual se presentaron otros testigos que sumaron más pruebas que vinculan a Zabala con los desmanes que vivió Concordia hace casi tres semanas, cuando la protesta del personal policial vino de la mano con saqueos a varios comercios de Concordia.

Vale recordar que el miércoles 18 de diciembre, la Fiscalía actuante había ordenado un allanamiento para la vivienda de calle Sarmiento al 1968, propiedad del efectivo de la Dirección de Tránsito de la Municipalidad de Concordia.

Cinco días después de ese hecho, se conoció el video que fue determinante para vincular al funcionario municipal con lo ocurrido en la noche de saqueos.

En el registro fílmico se ve a Zabala realizando diversos viajes con su automóvil y retornar siempre con varios elementos y mercaderías que eran bajados del coche, inclusive con la ayuda de sus hijos. Una de las escenas que más impacta es cuando de su vehículo baja un pesado termotanque, el cual es ingresado a su vivienda a través de su garaje. Como así también un carrito de supermercado al que carga con varios elementos y con mucho esfuerzo también logra meter al mencionado garaje.

Con la difusión de esa prueba hubo más personas que fueron a tribunales para testimoniar al respecto e inclusive aportar más pruebas que incriminarían de manera directa al ahora imputado.

Con respecto a la carátula que hasta el momento tiene este caso testigo, de acuerdo a lo que señala el Artículo 167 del Código Penal de la Nación Argentina, “se aplicará reclusión o prisión de tres a diez años” para el robo “que se perpetrare con perforación o fractura de pared, cerco, techo o piso, puerta o ventana de un lugar habitado o sus dependencias inmediatas”.

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