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Deportes

"El presidente de San Lorenzo es un boludo"

Así lo calificó el vicepresidente primero de Quilmes, Carlos Coloma, tras los incidentes registrados luego del empate en el Nuevo Gasómetro. Denunció que los dirigentes delCiclón liberaron la zona y que auxiliares de la entidad los golpearon en los vestuarios.

El vicepresidente primero de Quilmes, Carlos Coloma, calificó como “un boludo” al titular de San Lorenzo, Matías Lammens, y lo acusó de “liberar la zona” para que agredieran “a todos” los miembros de la dirigencia visitante en la zona de vestuarios del Nuevo Gasómetro.

“Liberaron la zona y nos golpearon a todos. El presidente de San Lorenzo es un boludo porque no nos defendió”, acusó Coloma, luego de los incidentes destados al término del partido, que Quilmes empató 2-2 con un tanto en el segundo minuto adicionado.

Auxiliares de San Lorenzo agredieron a directivos visitante en la zona de vestuarios y la peor parte la llevó el vice segundo, Carlos Martinangel.

Previamente, en el pasillo hacia los camarines, también fue golpeado el juez asistente Andrés Barbieri, que anuló por posición adelantada un gol legítimo de San Lorenzo en la primera parte.

El empate en el Nuevo Gasómetro, que representó el sexto partido sin victorias, mantuvo al equipo local en zona de descenso.

Agredieron a dirigentes de Quilmes en el Nuevo Gasómetro

Uno de los árbitros asistentes del encuentro San Lorenzo-Quilmes y dirigentes del equipo visitante fueron agredidos en la zona de vestuarios por hinchas locales, una vez finalizado el cotejo válido por la fecha 12 del torneo Inicial.

Tras el empate (2-2) agónico que consiguió el Cervecero en tiempo de descuento hubo dos episodios de violencia en la zona de camarines del estadio Nuevo Gasómetro.

Por un lado, Andrés Barbieri, el asistente número dos, recibió un golpe cuando circulaba por la manga y se dirigía al vestuario junto al árbitro Patricio Loustau.

Barbieri le anuló un gol lícito a Luis Aguiar por una supuesta posición adelantada a los 18 minutos del primer tiempo cuando el partido estaba 1-0 para el visitante.

Mientras que, por otro lado, los dirigentes de Quilmes que acompañaron la delegación gritaron el segundo tanto del equipo de Omar De Felippe en uno de los palcos. Eso generó la bronca de los plateístas locales.

Cuando se dirigían al vestuario visitante, buena parte de los dirigentes fueron agredidos y golpeados por hinchas del Ciclón, que según palabra de los quilmeños fue una “zona liberada”.

El que se llevó la peor parte en cuanto a los golpes fue el vicepresidente segundo Carlos Martinángeli, quien estaría analizando realizar la denuncia policial correspondiente.

Cuando intervino la seguridad privada y la polícia hubo encontronazos con los agresores, aunque no se registraron detenidos, una vez terminada la pelea.

Télam

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